Sabor y aroma: El mango tiene un sabor dulce y afrutado, con matices que pueden variar según la variedad. Su aroma es agradable y distintivo.
Textura: La pulpa del mango es suave y jugosa cuando está madura. Puede variar desde firme hasta muy suave, dependiendo de la variedad y el grado de maduración.
Color: Los mangos pueden tener una amplia gama de colores, incluyendo tonos de amarillo, naranja, rojo y verde, dependiendo de la variedad y su estado de madurez.
Nutrientes: El mango es una buena fuente de nutrientes como la vitamina C, vitamina A, vitamina E, vitamina K, potasio y fibra dietética. También contiene antioxidantes como los carotenoides y flavonoides.
Beneficios para la salud: El consumo regular de mango se ha asociado con varios beneficios para la salud, incluyendo la mejora de la salud digestiva, la salud ocular, la función inmunológica y la salud de la piel. Los antioxidantes presentes en el mango también pueden ayudar a combatir el estrés oxidativo y reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
Versatilidad culinaria: El mango se puede disfrutar crudo, en ensaladas de frutas, batidos, jugos, salsas, postres, y también se puede cocinar en platos salados como ensaladas, salsas para carnes o mariscos, e incluso en platos principales.
Estacionalidad: Aunque su disponibilidad puede variar según la región, generalmente la temporada de mango se encuentra en los meses de primavera y verano en climas tropicales y subtropicales.
Conservación: Los mangos maduros deben almacenarse en el refrigerador para prolongar su frescura. También se pueden pelar y cortar en trozos para congelar y utilizar más tarde en batidos u otros platos.